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Bigotes de los gatos. 5 preguntas y curiosidades.
Los bigotes de los gatos destacan en la cara y son característicos de los felinos, pero ¿sabemos qué son exactamente y cuál es su función? Lo aclaramos a continuación.
¿Cómo es la estructura del pelo en los gatos?
El pelo consta de una parte afilada visible, el tallo, y una parte engrosada, el bulbo o raíz, que se incrusta en la dermis quedando oculta.
Cada filamento está constituido por células queratinizadas. Podemos distinguir tres partes.
- Médula. Es la parte central que contiene el núcleo.
- Cortex. Es la parte intermedia y donde se encuentra la melanina, el pigmento que da color al manto.
- Cutícula. Es la parte exterior. Es transparente. Está formada por la superposición de células muertas.
Aunque comparten estructura no todos los pelos del manto son iguales. Existen pelos primarios, lisos o de cobertura; pelos secundarios, más cortos; y el subpelo, que conforma un entramado lanoso que actúa como aislante y permite mantener la temperatura corporal.
También podemos encontrar algunos pelos más desarrollados. Estos son los pelos táctiles y los pelos de protección.
Bigotes de los gatos y otros pelos táctiles
Los bigotes de los gatos son un tipo de pelos táctiles. Reciben también el nombre de vibrisas mistaciales. Se caracterizan por tener una estructura similar a la del resto de pelos del manto con algunas particularidades. El grosor duplica al de un pelo convencional, la base es cinco veces más ancha y están insertados en la dermis a mayor profundidad.
Las vibrisas se caracterizan por crecer en folículos pilosos indivivuales dotados de un seno sanguíneo ampliamente inervado. A cada folículo se estima que llegan entre 100 y 200 células nerviosas aferentes primarias que estimulan a distintos tipos de mecanorreceptores (tacto, presión, dolor, temperatura…)
Cada bigote actúa como un transductor, convirtiendo la información mecánica sobre el entorno en una señal eléctrica. A diferencia de otros folículos, los terminales nerviosos son adrenérgicos y la sinapsis entre los nervios sucede mediante neurotransmisores llamados epinefrina y/o norepinefrina.
La información sensorial es conducida por el nervio trigémino hasta la corteza cerebral. En algunas especies como las ratas, cada vibrisa tiene una representación identificable en la corteza somatosensorial del cerebro. Se trata de grupos de neuronas densamente empaquetadas y dispuestas en columnas, que reciben el nombre de barriles. Tales estructuras no se han encontrado en gatos. Esto podría deberse a que los bigotes en esta especie solo se estimulan pasivamente, por lo que no necesitarían una región de procesamiento tan especializada.
¿Dónde se sitúan los pelos táctiles o vibrisas?
Los gatos poseen pelos táctiles en el labio superior (los bigotes), y también encima de las cejas, detrás de las mejillas, en la barbilla, y eventualmente en la parte posterior de las extremidades anteriores.
Pelos táctiles en la cara, sobre las cejas. Fuente
Según la localización de los pelos táctiles se denominan:
- Vibrisas mistaciales. Son los bigotes propiamente dichos. Se sitúan en el labio superior repartidas en cuatro hileras.
- Vibrisas genales: se ubican en las mejillas
- Vibrisas superciliares: localizados encima de las cejas
- Vibrisas mandibulares: situados en la barbilla.
- Vibrisas carpales o ulnares: en las proximidades del carpo de las extremidades anteriores.
¿Cuántos bigotes tiene un gato?
Por lo general, los gatos cuentan con 8 – 12 pares de bigotes. Se sitúan a ambos lados del hocico, en la zona del labio superior sobresaliendo ampliamente de la cabeza. A esta cifra deberemos sumar los demás pares de pelos táctiles.
Larguísimos bigotes o vibrisas. Fuente.
¿Para qué sirven los bigotes de los gatos?
La función de los bigotes es la de apreciar los cambios del viento en velocidad y dirección. Pequeñísimas variaciones hacen que vibren, de ahí el nombre de vibrisas, permitiéndoles relacionarse con el entorno de una forma extraordinaria.
Los bigotes les permite a los gatos determinar la distancia a la que se encuentra un objeto, reconocer la forma y la textura de la superficie del objeto. Todo ello incluso en condiciones de oscuridad.
Sirven además para medir distancias por las que tienen que pasar. Al sobresalir los bigotes más allá de la cabeza, los pueden utilizar para saber si un sitio es demasiado estrecho para atravesarlo.
Además de la función táctil, las vibrisas superciliares también protegen en gran medida los ojos.
Por último los bigotes constituyen un elemento más en la comunicación corporal.
¿Se pueden cortar?
Los bigotes, y las vibrisas en general, no constituyen un elemento ornamental, sino que como hemos visto, dotan al gato de un sentido táctil perfecto y le permite relacionarse con el entorno de forma adecuada. Si las arrancamos resultará muy doloroso para el animal al poseer numerosas terminaciones nerviosas.
Si solo cortamos las puntas no sufrirá, pero le estaríamos privando de gran información sensorial. Faltarían los elementos sensores para explorar el área circundante. En consecuencia el gato no podría calcular bien las distancias y se volvería más torpe.
Curiosidades de las vibrisas
Las vibrisas están sometidas a un ciclo de crecimiento similar al del resto de pelos. Mudan y se renuevan durante toda la vida.
La longitud de las vibrisas está determinada genéticamente.
Estos pelo gruesos parecen no retener la melanina. Esto explicaría por qué el color más abundante de las vibrisas es el blanco, independientemente del color del manto. Existen, no obstante, excepciones y en algunas razas pueden ser oscuras. En gatos que portan el gen agoutí pueden ser incluso con bandas negras y blancas. En los gatos Habana Brown su estandar racial exige que los bigotes sean marrones.
Gato con bigotes blancos y bicolor. Se observa color negro en la zona proximal de algunas vibrisas. (Fuente)
En algunas razas como el Selkirk Rex las vibrisas son rizadas. En la raza LaPerm pueden ser lisas, onduladas o rizadas.
Generalmente faltan en el Sphinx y otras razas desnudas, son cortas en el Devon Rex, y dobladas y torcidas en el German Rex.
Pelos de protección
Son pelos especiales, rígidos y relativamente cortos, cuya misión es proteger los órganos de los sentidos:
- Pestañas (cilia) se implantan en el borde libre de los párpados. No existen en los gatos.
- Tragos (tragi) se implantan en el borde e interior del meato acústico externo.
Pelos en el interior de las orejas (tragos). Fuente
Si quieres saber más sobre el manto de los gatos y sus particularidades te puede interesar el curso Razas de gatos: morfología felina.